Algunos de estos ejemplares tienen más de 1.000 años y antaño llegaron a formar bosques en la zona de Las Cañadas.
El Cabildo de Tenerife ha anunciado este lunes una inversión plurianual de 757.180 euros, que finalizará en 2026, para la conservación y mejora de los bosques de cedro canario (Juniperus cedrus) del Parque Nacional del Teide.
El presidente del Cabildo, Pedro Martín, ha destacado en una nota la labor de investigación que se realiza en el Parque Nacional del Teide, “donde se trabaja intensamente en todos los aspectos de preservación de las especies propias, así como en controlar aquellas que no lo son”.
Al respecto, ha señalado que en el caso de los cedros canarios se está realizando “un importante esfuerzo científico” en el que están implicados investigadores de varias universidades y entre sus estudios y avances se encuentran la datación de ejemplares que superan los 1.400 años de antigüedad.
“El Parque Nacional de Teide es un importante laboratorio para estudiar la biodiversidad. Cada planta, cada ser vivo que se encuentra en sus límites es una muestra científica que nos permite descubrir aspectos importantísimos sobre especies y su evolución, y por ello es imprescindible continuar dotando económicamente proyectos que ayuden a mantener esa biodiversidad”, ha subrayado Martín.
El cedro canario es una especie propia de Canarias y Madeira y recientes estudios han demostrado la longevidad de algunos ejemplares que se encuentran en el Parque Nacional del Teide, ha indicado asimismo la consejera de Gestión del Medio Natural y Seguridad del Cabildo, Isabel García, que ha recordado que en otros tiempos tuvieron presencia en forma de bosques en las denominadas Cañadas.
“Desde el Cabildo reforzamos y apoyamos los proyectos iniciados por la dirección del Parque Nacional siendo conscientes de la importancia de su desarrollo para aumentar y reforzar la biodiversidad propia de este espacio protegido”, ha proseguido la consejera.
Los trabajos incluidos en este proyecto incluyen la colecta de semillas procedentes de los ejemplares que existen en el Parque, la obtención en vivero de nuevos ejemplares, su plantación en el medio natural y su seguimiento y control.
Los cedros del Parque han sido capaces de superar cinco erupciones volcánicas en los últimos 500 años, continuas caídas de rocas y aún así han podido desarrollarse en un clima árido y frío, sin apenas suelo, ha explicado la corporación insular en su nota.
La dirección del Parque Nacional del Teide realiza un trabajo “intenso” relacionado con medidas de conservación y protección con el objetivo de la recolonización de los llanos de los que fueron expulsados estos árboles, ha precisado el Cabildo tinerfeño.