Aumentan en las Islas las partículas en suspensión por los efectos del cambio climático, los episodios de calima sahariana y el crecimiento del tráfico, según Ecologistas en Acción.
La contaminación del aire aumentó en 2022 en España por el aumento de la movilidad, una vez finalizadas las restricciones por la COVID-19, la sequía y el calor, de modo que el 100% de los españoles y el 92% del territorio “respiró aire con nivel insalubre de contaminación”, según el informe de calidad del aire presentado por Ecologístas en Acción. En el caso del Archipiélago, este repunte de contaminación durante el pasado año se reforzó con el incremento de episodios de partículas en suspensión y ozono troposférico, el aumento de las temperaturas y la escasez de lluvias.
El informe anual sobre la calidad del aire señala que la totalidad de la población canaria estuvo expuesta el año pasado a unos “niveles insalubres de contaminación”, registrando la peor situación de la última década en partículas en suspensión. En el informe se analizaron 47 estaciones oficiales de medición instaladas en Canarias que registraron un aumento notable de los niveles de partículas en suspensión (PM10 y PM2,5) y más matizado de dióxido de nitrógeno (NO2), aunque sin alcanzar este último contaminante las concentraciones habituales en años anteriores a la pandemia.PUBLICIDAD
El aire contaminado afectó en 2022 a la totalidad de la población canaria y, según la organización, si se toman los estándares de la normativa, más laxos que las recomendaciones de la OMS, los 2,2 millones de canarios respiraron también aire contaminado por encima de los límites legales, superando el valor límite horario de partículas PM10 en todas las zonas y el valor límite anual de partículas PM10 en la zona sur de Gran Canaria.
El año 2022 fue muy seco y el más cálido en España desde al menos 1961 y la estabilidad atmosférica activó los episodios de contaminación por partículas, en su mayor parte procedentes del norte de África, la conocida calima, de manera que las partículas PM10 presentaron en Canarias la peor situación de la última década.about:blank
CALOR EXTREMO
Para la organización ecologista, el calor extremo del verano contribuyó al aumento del ozono, en especial durante las olas de calor de junio, julio y agosto, y confirma que “el cambio climático es un factor determinante en el agravamiento de los episodios de la mala calidad del aire”.
No obstante, el factor esencial para explicar el repunte de la contaminación atmosférica en 2022 es la recuperación de la movilidad motorizada y de la actividad económica previa a la pandemia de la COVID-19.
Pese al desplome general del NO2 en un 20% respecto al nivel medio entre 2012 y 2019, Barcelona volvió a incumplir el límite legal de dióxido de nitrógeno (NO2); Madrid lo igualó, y otras 30 zonas rebasaron los objetivos de las partículas y el ozono. El Tribunal Europeo de Justicia ha condenado a España por el “incumplimiento reiterado y sistemático” del límite anual de NO2 en ambas ciudades.
De acuerdo con los nuevos límites propuestos por la Unión Europea, el 80% de la población “respiró aire contaminado”, tras analizar los datos recogidos en 780 estaciones oficiales de medición en el país. Así, el documento concluye que la calidad del aire empeoró en 2022 respecto a los dos años precedentes y señala que se registró un aumento significativo de los niveles de partículas en suspensión (PM10 y PM2,5) y más matizado de dióxido de nitrógeno (NO2) y ozono troposférico, aunque sin alcanzar estos dos contaminantes las concentraciones habituales en años anteriores a la pandemia.
De acuerdo con los valores máximos de contaminación recomendados por la OMS, actualizados en 2021, y el objetivo a largo plazo para proteger la vegetación de la Unión Europea, el aire contaminado afectó en 2022 a toda la población española y a 463.000 kilómetros cuadrados, que representan el 92% del territorio. Si se tomaran los estándares de la normativa europea, que son más laxos, 7,6 millones de personas respiraron aire contaminado, dos millones de habitantes más que en 2021. La superficie expuesta a niveles de contaminación que dañan la vegetación alcanzó 95.000 km2, una quinta parte del territorio.
Por zonas, el informe señala que las principales fuentes de contaminación fueron las áreas urbanas, donde se concentra el tráfico motorizado, y en determinadas áreas de fábricas y en el entorno de las grandes centrales termoeléctricas son estas fuentes industriales las que condicionan de manera decisiva la calidad del aire. Asimismo, señala que el transporte aéreo y marítimo tiene gran repercusión en la calidad del aire del entorno de aeropuertos y puertos.
Para la ONG, la contaminación del aire debería abordarse como un “problema sanitario de primer orden”, ya que cada año mueren de forma prematura 25.000 personas, según la Agencia Europea del Medio Ambiente, y, de ellas, 10.000 en episodios de alta contaminación, según el Instituto de Salud Carlos III.